San Martín le empató 1-1 a Nacional al final del partido
Grita Ludueña como todo el mundo. Inmortaliza al viento su furia en el gol agónico. Y ese festejo recorre la cancha y se mete entre los casi tres mil corazones, incluída la muela, que en la tribuna, enseñan los puños en señal de esperanza.
Y comprendemos todos que anoche la angustia rodó ágil como la pelota y que los santos, extrañaron tanto al Pepe Díaz que se olvidaron que jugaban la Copa. San Martín logró un empate de 1-1 en el último suspiro con el durísimo Nacional uruguayo y dejó en vilo su pase a octavos de final, inundándose de errores en el penúltimo pase, ligeritos en las ideas como si la poca asistencia de público hubiese pasmado al equipo.
Los santos empezaron empeñosos, pero muy pronto la ausencia del Pepe Díaz desdibujó la naturaleza de juego santo.
No había quién piense, quién la pare, la pise, la distribuya.... El Patito Quinteros se olvidó del juego, no estuvo ni se reportó nunca al equipo, por eso fue cambiado por un Del Solar quien tampoco trascendió.
Nacional, en cambio, desde el arranque se presentó sólido y duro por arriba, un once macizo que frenó en seco a Ludueña y a Arzuaga haciendo inútil los pases teledirigidos del Churrito Hinostroza.
Sólo cuando Pedrito García se animaba a hilvanar jugadas con los de arriba, los santos hacían daño.
Vitorino y Romero, los dos centrales charrúas dejaban notar su lentitud a suelo, arriba eran infranqueables.
Sabido esto, los santos no aprovecharon o si lo intentaron nunca supieron concretar.
Ludueña, Arzuaga y García siempre fueron más veloces con las ideas pero no salió nada anoche. Desde el inicio Nacional se impuso por poquísimo más, así hasta los 21, cuando Pedro García en primera instancia y Ludueña luego asustaron la portería defendida por Rodrigo Muñoz. Luego, Butrón se confía en la salida y casi llega el gol de Nacional en un blooper. Intentó salir jugando con pelota dominada, García se la quitó
Fuente : www.elbocon.com.pe
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